La
Plenitud de los Gentiles
Todas
las citas bíblicas se encierran entre comillas dobles ("") y han sido tomadas de la Versión Reina-Valera
Revisada en 1960 (RVR60) excepto en los lugares en que además de las comillas dobles ("") se indican otras
versiones mediante abreviaciones que pueden ser consultadas al final del escrito.
Paul Wilson
4ª Parte
de: TÉRMINOS PROFÉTICOS
Hay un período
de tiempo del cual se habla en la epístola a los Romanos que tiene una referencia muy especial a los días en
los cuales nosotros vivimos como muestra de que habrá un final al presente período de la gracia. Este período
es llamado “la plenitud de los gentiles".
Leemos, "No
quiero, hermanos, que ignoréis este misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que
ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta que haya entrado la plenitud de los gentiles". Epístola
a los Romanos 11: 25.
Hay varias cosas
que son señaladas en este versículo y en todo el capítulo 11 de la epístola a los Romanos: a saber,
En primer lugar,
que Israel ha sido parcialmente cegado en los tratos gubernamentales de Dios;
En segundo lugar,
que los gentiles son llevados actualmente a un lugar especial de bendición y favor;
En tercer lugar,
que este período actual de preferencia gentil va a terminar e Israel volverá a ser el centro de los caminos
de bendición de Dios en la tierra.
Nosotros podríamos
preguntar entonces: «¿Cómo obtuvo Israel el favorecido lugar especial en la pasada dispensación?»
Nosotros tendremos que remontarnos al Antiguo Testamento y veremos allí que después del diluvio los hombres
se volvieron idólatras y se corrompieron en la adoración de imágenes detrás de las cuales había
demonios. Desde esta condición Dios llamó a Abraham (Josué 24: 15; Génesis 12: 1-3), y le hizo
promesas en cuanto a su descendencia después de él. Dios inició en Abraham una línea de especiales
promesa y bendición en la tierra. De este privilegio especial se habla de manera figurativa en Romanos como un "olivo"
del cual Abraham fue la raíz.
Los israelitas
eran las ramas naturales de este "olivo" (véase Jeremías 11: 16).
Antes de los días
del cristianismo el hecho de nacer judío era una clara ventaja. Promesas especiales les eran conferidas. Esto está
bien descrito en las palabras de Romanos 3: 1, 2 donde leemos,
“¿Qué
ventaja tiene, pues, el judío? ¿o de qué aprovecha la circuncisión? Mucho, en todas maneras.
Primero, ciertamente, que les ha sido confiada la palabra de Dios".
Ellos tenían
las promesas, los pactos, la ley, las Sagradas Escrituras del Antiguo Testamento y muchas otras ventajas.
La siguiente pregunta
que surge es: «¿Por qué este pueblo favorecido fue cegado y cortado del olivo?» Su ceguera se produjo
en primer lugar por su propio alejamiento voluntario de Dios, y luego por el justo decreto de Dios cuando rechazaron todos
los medios de llamamiento a volver a Él.
Nosotros encontramos
que Dios pronunció el decreto de ceguera judicial contra los judíos en los días de Isaías.
Leemos, "Y
dijo: Anda, y dí a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no comprendáis.
Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para que no vea con sus ojos, ni oiga
con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya para él sanidad". Isaías 6:
9, 10.
Esta sentencia
fue dictada contra los israelitas más de 750 años antes que el Señor Jesús viniera al mundo. Bien
podría ser planteada otra pregunta. «¿Cuándo esta amenaza de ceguera fue realmente llevada a cabo?»
En la respuesta a esta pregunta nos impresiona la maravillosa longanimidad de Dios. Dios esperó larga y pacientemente.
Él envió profeta tras profeta a Su extraviado pueblo y finalmente envió a Su Hijo a quien ellos rechazaron
y echaron fuera. Incluso durante la vida y el ministerio del Señor Jesús Su propia nación cerró
los ojos a la luz. En el evangelio según Mateo capítulo 13 el Señor mencionó la sentencia de ceguera
pronunciada por el profeta Isaías. Dicha profecía se estaba cumpliendo parcialmente debido a la persistente
obstinación de ellos.
Pero incluso entonces
la paciencia de Dios perduró sobre Su pueblo terrenal; y después de la muerte, resurrección y ascensión
del Señor Jesús Él les envió un mensaje de perdón y salvación gratuitos mediante
el testimonio del Espíritu de Dios rendido a la obra consumada de Cristo. Esto es mostrado claramente en la defensa
del mártir Esteban en el capítulo 7 del libro de los Hechos. Después que Esteban los acusó de
ser ellos culpables por resistir al Espíritu Santo ellos lo apedrearon, mostrando así el rechazo de ellos a
la oferta final de misericordia de Dios antes que la sentencia fuese llevada a cabo en su totalidad.
Los judíos
que estaban en Jerusalén habían sellado así su propio destino. Entonces, cuando los mensajeros del evangelio
fueron predicando de ciudad en ciudad ellos buscaron en primer lugar a los judíos. Cuando los judíos rechazaron
el evangelio la ceguera descendió sobre ellos. Dicha ceguera parece haberse establecido gradualmente de lugar en lugar
a medida que rechazaban el último mensaje de la gracia. Se asentó un tanto de la misma manera en que la gloria
abandonó el templo en el libro de Ezequiel, — poco a poco, como si ella detestara hacerlo. Es bastante fácil
seguir el rastro a través del libro de los Hechos del progreso del rechazo del evangelio por parte de los judíos
y el cambio a los gentiles. Podemos citar algunos ejemplos:
Leemos, "Entonces
Pablo y Bernabé, hablando con denuedo, dijeron: A vosotros a la verdad era necesario que se os hablase primero la palabra
de Dios; mas puesto que la desecháis, y no os juzgáis dignos de la vida eterna, he aquí, nos volvemos
a los gentiles". Hechos 13: 46. Esto ocurrió en Antioquía de Pisidia. A continuación, observen el
mismo suceso en Corinto:
"Pablo estaba…
testificando a los judíos que Jesús era el Cristo. Pero oponiéndose y blasfemando éstos, les dijo,
sacudiéndose los vestidos: Vuestra sangre sea sobre vuestra propia cabeza; yo, limpio; desde ahora me iré a
los gentiles". Hechos 18: 5, 6.
Finalmente, nosotros
vemos al apóstol Pablo enviado a Roma, la gran capital del imperio, la metrópoli mundial, como prisionero, a
causa del odio judío. Cuando llegó a Roma, él
"Convocó
a los principales de los judíos… a los cuales les declaraba y les testificaba el reino de Dios desde la mañana
hasta la tarde, persuadiéndoles acerca de Jesús, tanto por la ley de Moisés como por los profetas…
Y como no estuviesen de acuerdo entre sí, al retirarse, les dijo Pablo esta palabra: Bien habló el Espíritu
Santo por medio del profeta Isaías a nuestros padres”. Pablo cita entonces la frase del libro de Isaías
capítulo 6 como aplicable al caso, terminando con,
"Sabed, pues,
que a los gentiles es enviada esta salvación de Dios; y ellos oirán". Hechos 28: 26-28.
Aquí, casi
800 años después de la declaración del profeta, la sentencia se cumple. De este modo finalizó
el evangelio anunciado "al judío primeramente ", y los gentiles se convirtieron en el centro del especial
favor de Dios en la tierra. Ellos fueron traídos a esto a través de la caída de Israel. Fueron injertados
en el "olivo" en la tierra. Nacer gentil es hoy una clara ventaja. En efecto, los gentiles ahora tienen "mucho,
en todas maneras".
Pero en la epístola
a los Romanos capítulo 11 Dios habla por medio de los apóstoles a los gentiles. Es una palabra solemne de advertencia
la que Él presenta allí. Él dice que si ellos no continúan en la bondad de Dios serán cortados
del olivo como lo fue Israel; y entonces si los gentiles son cortados, Israel será injertado de nuevo.
Nosotros debemos
recordar que en todo esto no se habla de que un cristiano que fracasa es cortado, ni de que un cristiano sea cortado en absoluto.
No se trata de la "vida eterna", sino del especial favor de Dios a personas en la tierra. Los gentiles tienen ahora
este favor y no los judíos. A los gentiles se les ha predicado de balde (es decir, gratuitamente) la "salvación
de Dios", pero tal como Dios sugiere, ¿Han continuado ellos en Su bondad? ¿Ha continuado la cristiandad
en la "fe que ha sido una vez dada a los santos"? (Epístola de Judas 3) ¡NO! ¡NO! ¡NO!
La respuesta es visible por todas partes. ¡Infidelidad, modernismo, evolución, falsas doctrinas, amadores de
los deleites más que de Dios! ¡Qué triste historia y qué grosera ingratitud hacia la salvación
de Dios preparada a un costo tan grande!
Lector, si usted no es verdaderamente
salvo, reciba esta advertencia. El Señor Jesús pronto vendrá para llevar a los verdaderos cristianos
al hogar, — muy pronto, ahora, — y entonces "entrará “la plenitud de los gentiles"; es
decir, se completará. La puerta de la gracia a los gentiles se cerrará y los meros profesantes serán
dejados atrás por ceguera judicial “a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad”.
(2ª Tesalonicenses 2: 12).
Tal es la segura condenación
de la Cristiandad que está en rápida decadencia.
Paul Wilson
Traducido del
Inglés al Español por: B.R.C.O.- Octubre 2024.
Otras
versiones de La Biblia usadas en esta traducción:
RVA
= Versión Reina-Valera 1909 Actualizada en 1989 (Publicada por Editorial Mundo Hispano).