JUICIO
DE LAS NACIONES EXISTENTES
Todas
las citas bíblicas se encierran entre comillas dobles ("") y han sido tomadas de la Versión Reina-Valera
Revisada en 1960.
Paul Wilson
14ª Parte
de: TÉRMINOS PROFÉTICOS
“Jesús
de Nazaret… anduvo haciendo bienes… a quien mataron colgándole en un madero. A éste levantó
Dios al tercer día… Y [Él] nos mandó que predicásemos al pueblo, y testificásemos
que él es el que Dios ha puesto por Juez de vivos y muertos". Hechos 10: 38-42.
Aquel mismo a
quien los hombres mataron es Aquel que va a ser Juez de ellos. La muerte no es una vía para escapar del encuentro con
Él como Juez porque Él juzgará a los muertos. Hay una manera, y sólo una, de escapar del juicio
que Él llevará a cabo; a saber, aceptándole ahora como Salvador. O bien Le conozco como Aquel bendito
que tomó mi lugar y murió en mi lugar en la cruz del Calvario y que llevó mis pecados en Su propio cuerpo,
o algún día estaré ante el tribunal de justicia y oiré de Sus labios mi condena. Él será
el Salvador y Sustituto del pecador, o su Juez.
Lector, ¿Le
conoce usted como su Salvador? Feliz es usted si Le conoce, pues entonces nunca vendrá a juicio. Pero si usted es un
extraño para Él en Su gracia, Su juicio inevitablemente lo alcanzará algún día. Él
juzgará tanto a los vivos como a los muertos, pero no al mismo tiempo.
Nosotros, los
que Le conocemos como nuestro Salvador, esperamos aquel bienaventurado momento en que Él vendrá y nos llevará
a todos al hogar para estar con Él en la casa del Padre. Y, tal como mencionamos en la última entrega, en aquel
entonces todas nuestras obras serán sometidas a revisión delante de Él. Entonces todo lo que ha sido
hecho sólo para complacerse a uno mismo será pérdida, y todo lo que ha sido hecho para Él será
recompensado y será ganancia. Esto tendrá lugar después que estemos seguros en el cielo.
Tan pronto como
todos los cristianos sean sacados de la tierra para estar con Cristo, el mundo comenzará a sentir el juicio de Dios
que será derramado sobre él con creciente furia. Durante esos días de angustia mundial, la iniquidad
se elevará a alturas sin precedentes, y entonces aparecerá el Hijo del Hombre viniendo en las nubes del cielo
para ejecutar personalmente venganza sobre los que no conocen a Dios. (2ª Tesalonicenses 1: 7-9). Cuando Él salga
del cielo, los santos que habrán sido llevados allí saldrán con Él como los "ejércitos
celestiales". Entonces los dos líderes de la iniquidad consumada del hombre serán tomados vivos y arrojados
al lago de fuego, y grandes multitudes serán muertas por la espada de Aquel que es "REY DE REYES Y SEÑOR
DE SEÑORES". (Apocalipsis 19: 11-21).
Después
que el Señor Jesús, como el Hijo del Hombre, haya eliminado a muchos que se habrán levantado en rebelión,
Él establecerá Su trono de juicio en la tierra para juzgar a las naciones existentes. Esta sesión de
juicio está descrita en el evangelio según Mateo capítulo 25, versículos 31-46.
“Cuando
el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono
de gloria, y serán reunidas delante de él todas las naciones”.
Él establecerá
"su trono de gloria" después que Él ya haya venido como el relámpago que golpea con juicio
repentino sobre Sus enemigos. En aquel entonces todas las naciones existentes de la tierra vana ser juzgadas ante Su tribunal.
Esta es claramente una escena terrenal porque no habrá naciones en el cielo; y no es el tiempo del juicio de los inicuos
muertos, porque cuando ellos son resucitados para ser juzgados las naciones habrán desaparecido. Los que comparecerán
aquí ante Su trono son las naciones gentiles existentes en la tierra en aquel momento. (En cuanto a los judíos,
cuando Él venga tratará con ellos por separado).
El método
de segregación y de juicio en "su trono de gloria" será único. Será un método
adaptado exactamente a la situación y a los requisitos. Tanto las ovejas (los salvados) como los cabritos (los perdidos)
estarán presentes en este juicio. En esto se diferenciará del tribunal de Cristo en el cielo donde los creyentes
van a tener sus obras revisadas porque sólo los salvos serán manifestados allí. Y en el juicio de los
inicuos muertos sólo comparecerán los no salvos. (Apocalipsis 20: 11-15). Pero aquí, ambas clases van
a comparecer para ser apartadas la una de la otra, — las ovejas puestas a Su derecha y los cabritos a Su izquierda.
La evidencia sobre
la cual aquellos gentiles de las naciones van a ser juzgados es también diferente. Ellos serán juzgados según
la forma en que trataron a ‘Sus hermanos’, — los mensajeros judíos, — que habrán recorrido
el mundo después que los cristianos salieran de él, predicando el "evangelio del reino". Mientras
que la mayoría de los judíos apostatarán y aceptarán al anticristo, habrá un remanente
fiel que creerá en la venida del verdadero Mesías; éstos saldrán por todas partes contando las
buenas nuevas de que Él viene. El mensaje de ellos será muy parecido al que predicaba Juan el Bautista antes
que Cristo viniera por primera vez. En Su primera venida, Cristo fue rechazado y el reino venidero fue postergado, mientras
que los cristianos fueron reunidos fuera del mundo para el cielo. Pero cuando los cristianos sean llevados al cielo, entonces
la predicación del "evangelio del reino" (Mateo 24: 14) será reanudada por judíos fieles. Estos
mensajeros judíos, llamados por Cristo "Mis hermanos" (Mateo 25: 40), padecerán mucha persecución
y muchos serán martirizados. Entre los gentiles, la fe en Dios y en el Rey venidero será puesta de manifiesto
por la manera en que el mensaje y los mensajeros son tratados. Seguirá siendo cierto que "sin fe es imposible
agradar a Dios". (Hebreos 11: 6).
Puede ser necesario
recordar a algunos que esta predicación del "evangelio del reino" no es una segunda oportunidad para los
que ahora rechazan el "evangelio de la gracia de Dios". A aquellos que en estas tierras rechazan ahora a Cristo
como Salvador, Dios les enviará un "poder engañoso, para que crean la mentira", con el propósito
de que los que rechazan la gracia "sean condenados". (2ª Tesalonicenses 2: 10-12). Pero hay millones en la
tierra que no han oído el "evangelio de la gracia de Dios". Indudablemente la mayor parte de la humanidad
en la tierra están fuera de cualquier profesión de cristianismo; para estos los mensajeros judíos llevarán
las buenas nuevas del reino venidero de Cristo. Estos pocos judíos fieles harán en probablemente no más
de siete años lo que la cristiandad había fracasado en hacer en casi dos mil años; ellos predicarán
este evangelio en "todo el mundo"- (Mateo 24: 14). Los gentiles que creen el mensaje mostrarán su interés
en sus mensajeros y en "su trono de gloria" oirán "al Rey decirles a los que están a Su derecha:
Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo". Mateo 25:
34.
En el versículo
recién mencionado el Hijo del Hombre es llamado el "Rey", y al dirigirse Él a los que están
a Su derecha los llama "benditos de Mi Padre". Ellos no conocerán a Dios en la relación de Padre d
ellos como lo hacen los creyentes en esta época de la gracia, sino que serán bendecidos por Su Padre. Otra característica
de diferencia de lo que pertenece a los cristianos es que el reino (terrenal) fue preparado para ellos "desde la fundación
del mundo ". Los creyentes de ahora fueron escogidos en Cristo "antes de la fundación del mundo". (Efesios
1: 4).
Es hermoso ver
la manera en que el "Rey" atribuirá a las "ovejas" haber hecho por Él personalmente lo que
ellas hicieron incluso por "el más pequeño" de Sus mensajeros; Él se identificará así
con estos “hermanos" judíos.
Una lección
similar fue la que aprendió Saulo de Tarso de camino a Damasco cuando él oyó que el Señor le decía:
“¿por qué me persigues?". Aquel perseguidor de cristianos tuvo que aprender que cuando él
los molestaba él perseguía a "Jesús". (Libro de los Hechos capítulo 9 , versículos
1-5). Y, al contrario, se demostrará que aquellos que habían despreciado a los mensajeros del "Rey"
habían rechazado al "Rey" mismo.
Otro asunto que
debe ser mencionado es que los "cabritos" a Su izquierda, — aquellos que rechazaron a los mensajeros
que llevaban el "evangelio del reino", — -serán enviados al "fuego eterno preparado para el diablo
y sus ángeles". (Mateo 25: 41). El lago de fuego no fue preparado para los hombres sino para el diablo y sus ángeles;
y, sin embargo, qué triste es que hombres rebeldes que no quieren aceptar la gracia de Dios lo compartan con ellos.
Paul Wilson
Traducido del
Inglés al Español por: B.R.C.O.- Noviembre 2024.